Escribe al autor
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Sobre este libro
Hace muchos años vivió en la India un viejo sabio llamado Vishnu-Dharma, quien era contemporáneo de un monarca de nombre Amara Shakti, padre de tres hijos. Jóvenes de edad, constituían una preocupación permanente para su padre el rey. No les interesaba la instrucción y tampoco mostraban, por otro lado, ningún signo revelador de estar capacitados para gobernar el reino. Lleno de ansiedad, el rey consultó a Vishnu-Dharma, el cual le prometió que en tan solo seis meses convertiría a los príncipes en sabios más notables que el rey de los planetas celestiales Indra. "Majestad, dijo el sabio, más importante aun que el conocimiento, es saber como aplicarlo adecuadamente. Eso es precisamente lo que yo quiero enseñarle a sus hijos. Van a aprender como pensar, no lo que hay que pensar. De esta forma estarán preparados para gobernar el mundo". Así pues el rey envió a sus hijos con Vishnu-Dharma. El sabio empezó a narrarle historias. "Estos relatos de animales y humanos despertaran vuestra inteligencia y os harán semejantes a los dioses". Lo que aquí presentamos son precisamente esos relatos fascinantes que se dividen en cinco secciones: Panchatantra, las cinco lecciones sabias.
Sobre de los autores
Prahlad Alfageme estudió Filología Clásica en la Complutense de Madrid y Sociología en la Universidad de Paris. A la edad de 29 años hizo su primer viaje a India y se quedó prendado de su cultura, al punto que los últimos 37 años ha vivido más tiempo allí que en ningún otro país. En la actualidad vive retirado de toda actividad docente, entregado a la traducción y la publicación de grandes clásicos de la literatura védica, inexistentes o pobremente reflejados en nuestra hermosa lengua castellana.
Hola, soy Juan Manuel,
Desde muy joven experimenté un sincero anhelo de trascendencia al que siempre y en todas las circunstancias de la vida he guardado fidelidad, cultivándolo lo mejor que he podido.
Ahora, en la madurez siento que no puedo hacer un disfrute privado de los frutos de aquella aspiración, antes bien, creo que hay que ofrecerlos al prójimo, tanto al conocido como al desconocido, sin esperar más gratificación que la de compartir los bienes en comunidad.
Aquí puedes comunicarte conmigo: http://www.bhaktiyoga.es
Estaré encantado de atenderte en el email jmd@bhaktiyoga.es